DE DÓNDE VENIMOS

Ritual Sound nació en 1992, cuando Chema Pascual comienza  a viajar de forma continuada por Asia.

Sus comienzos en el mundo del sonido vienen por la llamada en un principio, de la música, lo que le lleva a formar varios grupos de pop, más tarde se decanta por la crítica musical en revistas como Ajoblanco, Europeo o Ruta 66. El círculo se abre hacia el sonido, con la experimentación, en este ámbito, realiza durante 10 años el programa radiofónico experimental de art-sonoro: Vaticano II.   De estos dos mundos nace la pasión hacia lo musical y lo sonoro desde una perspectiva amplia, asi el viaje y el sonido quedan fundidos en una mirada hacia el alma musical de cada instrumento. Todo ello le lleva a combinar lo musical y el sonido con la investigación de estos en sus culturas de origen.

En sus viajes no cesa de buscar instrumentos en los que prima el sonido y su significado más que su sentido rítmico o musical. Así descubrió los primeros cuencos tibetanos en India y Nepal, comprendiendo su capacidad para generar espacio y calma en la mente. En Australia hallamos los didgeridoos Aborígenes, en China y Java los gongs, y un larguísimo etc, puesto que el viaje y el descubrimiento forma parte de su trabajo.

Asi cada instrumento es buscado y experimentado en su lugar de origen de la mano de los artesanos que lo fabrican, de este modo, uno a uno van pasando por sus manos, corazón y oidos, para seguir ofreciendo el alma del sonido con calidad.

Del mismo modo cuando hay instrumentos prácticamente imposibles de conseguir, el trabajo se realiza con prototipos ancestrales, recreándo de la manera más fiel los originales, siempre de la mano de artesanos expertos y luteristas.

A DÓNDE VAMOS

Ritual Sound es un camino que no tiene fin. Afortunadamente el ser humano sigue creando herramientas para contactar con su espíritu, con el de los demás, con el todo...

Chema sigue buscando instrumentos, creando otros, aprendiendo cada día de culturas remotas y de las más cercanas. En definitiva, comparte lo que disfruta y el viaje continua...¿nos acompañas?